TRAVEL | MONUMENTS, HISTORY AND THE GOLDEN HOUR

Nos llevó toda la mañana visitar la Catedral y los Reales Alcázares. Están muy cerca pero son enormes. La Catedral es impresionante, es la catedral gótica más grande del mundo, con eso digo todo, pero además el patio de naranjos anexo, desde donde se ve la Giralda, es precioso, uno de los sitios que más me gustó del viaje. Tiene una retícula de naranjos, fuentes y canales en el suelo. Se construyó sobre una antigua mezquita y quedan restos árabes, de hecho la Giralda era parte de la antigua mezquita. Se sube a la torre por una rampa que recorre el perímetro. He subido ya a bastantes torres, sobretodo en Italia, pero siempre eran escaleras, y la verdad es que es muy curioso, por lo visto era para que se pudiera subir a caballo. La vista de la ciudad arriba es también preciosa. Me gustó más que la de las setas, porque se ven los tejados de la catedral, que como no cogimos cita previa no los pudimos visitar, y dicen que es algo imprescindible.
Los Reales alcázares eran enormes y dignos de ver aunque hace una semana estuve en la Alhabra, y supongo que por eso no me impresionaron tanto. Al acabar las dos visitas estábamos agotados pero comimos algo rápido y caminamos hasta la plaza de España donde yo iba tumbándome al sol en cada sitio que veía y Miki tiraba de mí para que no me quedara dormida.
Al lado está el Parque de Maria Luisa, que se puede ver andando o en los típicos coches de caballos. Nosotros íbamos caminando, agotados, porque el coche de caballos era carísimo y cada vez que pasaban a nuestro lado nos arrepentíamos de no haber cogido uno. La verdad es que la gracia del parque es verlo paseando en el carro, caminando no merece tanto la pena, al menos en invierno.
Acabamos volviendo por la orilla del río y después de unos 20 minutos, al acercarnos a la Torre del oro  ocurrió lo inevitable, nos sentamos en un banco a descansar y yo me quedé frita. Cuando me desperté estaba atardeciendo con esa luz dorada tan bonita que daba directamente en la torre, supongo que por eso se llama Torre del Oro. Cruzamos a la otra orilla para ver Sevilla dorada y volvimos tomando un merecidísimo helado.

It took us all morning to visit the Cathedral and the Alcazar. They are very close but both of them are huge. The Cathedral is impressive, the world's largest Gothic cathedral, it sais everything, but also the annexed orange tree courtyard, where you can see the Giralda, is awesome, one of the places I like the most during the trip. It has a grid of orange trees, fountains and canals on the floor. The complex was built over an ancient mosque and there are Arab remains, indeed the Giralda was part of the old mosque. You climb up to the tower by a ramp along the perimeter. I've already climbed to some towers, especially in Italy, but there are always stairs, and this one was very curious, apparently the reason was to be able to go up riding a horse. The view of the city up is the best. I liked it more than over the mushrooms, because you see the roofs of the cathedral, which we could not visit because we didn't have an appointment and people say it's a must.
The Alcazares were huge and worth seeing. A week before I was in the Alhabra and guess that's the reason why it do not impress me much. At the end of the two visits we were exhausted but we ate something quick and walked to the Plaza de España where I spent my time looking for a place to rest under the sun, but Miki always pulled me so I couldn't take a nap.
The Maria Luisa park is so lose and you can see it over the typical horse carriages. We walked, exhausted, because the carriage was so expensive...every time a carriage passed we regret of not have caught one. The truth is that is cooler ro see the park in the horse-car, walking does is not worth it, at least in winter.
After that we keep walking along the river and after about 20 minutes, as we approach the Torre del Oro the inevitable happened, we sat on a bench to rest and I was asleep. When I woke up it was dusk with that beautiful golden light that goes straight  to the tower, I guess that's why it is called Gold Tower. We crossed to the other side to see Sevilla in gols and we returned eating a deserved ice-cream.