Empieza la temporada de esquí!
Es lo que más me gusta del invierno,
sin el esquí me costaría mucho más sobrellevar los meses de frío, la verdad.
Desde hace algo más de diez años, que aprendí a esquiar, trato de ir todos los
inviernos a Andorra unos días. Me
encanta Grandvalira. No conozco muchas más estaciones, solamente Formigal y Valdesquí, que subo los días que me apetece mucho esquiar porque
está cerca.
Soy una enamorada de Grandvalira, está algo lejos pero el
viaje merece la pena. Le tengo mucho cariño porque mis inicios en el esquí
fueron en Pas de la Casa, una de mis mejores amigas me llevó con toda su
familia una semana y desde entonces no he parado. Recuerdo el primer día que
dejé de bajarme en bucle la pista verde y azul de Pas de la casa y por fin pasé
a Grau Roig. Ese valle es espectacular, no sé si lo conocéis, es enorme y
sobretodo me gusta porque tiene árboles, unas pistas súper bonitas tipo caminitos y suele hacer mejor tiempo allí, del otro lado de la montaña.
Siempre quise ir algún año a uno de los hoteles de Grau Roig, aunque sobretodo me atrae
mucho alojarme en un Hotel con
Spa en Grandvalira. Tiene que ser increíble terminar de esquiar, tomarte
algo en la nieve, dejar las cosas en el hotel y meterte en el spa. Me imagino
la sensación, tiene que ser de las más placenteras del mundo. Algún día igual
voy a un hotel de lujo en Andorra,
pero de momento una de mis mejores amigas tiene allí casa y el plan está
genial.
Solemos hacer el viaje en coche desde Madrid después del
trabajo y llegamos de madrugada para aprovechar al máximo los días de esquí.
Vamos unos cuantos amigos y ese el mejor plan del invierno.
Los días en Andorra son una maravilla. A veces cierro los ojos y recuerdo la sensación de estar allí, sentada en el telesilla al sol viendo el increíble paisaje. Me encantan las montañas nevadas, me producen una sensación de relajación increíble, alcanzo un estado de máxima felicidad. Siempre que vivo ese momento pienso “Julia disfruta y atrapa estos minutos porque los recordarás cuando vuelvas a Madrid”, soy súper consiente en el momento.
Cuando bajas una pista que dominas, a buena velocidad, con buena nieve y buen tiempo no tiene precio. Pero lo que me encanta del viaje de esquí no es sólo eso, es todo lo que conlleva. Los madrugones, las comidas en las pistas al aire libre mientras se oye de fondo al DJ, las tardes de muerte y siesta, los juegos de mesa, las cenas calóricas con amigos y la buena sensación que adquiere el cuerpo después de un día intenso de deporte.
Como veis soy una apasionada del esquí, como tanta gente. ¿Qué tendrá? Yo creo que es la experiencia completa. Es una pasada, y Grandvalira es increíble. Este año espero poder irme unos días también! Aunque tengo un viaje importante programado, espero que no me impida disfrutar de otro año más de esquí en buena compañía. ¿Vosotros esquías? ¿Dónde soléis ir?
♥ Gracias por leer | Thanks for reading ♥
0 Comments
Muchas gracias por leerme y comentar / Thank you so much for reading and comment